Una De piratas

escrita el 11 de septiembre del 2002 por Carlos Rinaldis Y Pablo D`Amato y republicada desde entonces todos los 11 de septiembre. Que los medios no nos hagan olvidar que el enemigo mayor de las democracias del mundo se llama Estados Unidos de Norte America.

Hoy llore por segunda vez, mis condolencias a los hermanos americanos. 11 de Septiembre, Día Triste parece ser… mal habido de un tiempo a esta parte.

“La democracia ha sido pisoteada”; “El enemigo del mundo y su política de terror propina un duro golpe a la libertad” mi memoria no olvida, La situación no permite medias tintas, es una guerra del bien contra el mal.

Comienzo a preguntarme después de todo este tiempo si de verdad pudimos cambiar las cosas, si toda la lucha contra el terror sirvió para algo; Después de haber visto voladuras, operaciones, acciones coordinadas para destruir toda red, todo lazo, todo vínculo y toda organización que ponga en riesgo la seguridad nacional.

Pienso en los que ya no están, en los que cayeron heroicamente en defensa de sus ideales. Las imágenes de miedo y muerte que se grabaron en el imaginario colectivo de toda generación en adelante. Imágenes de ese 11 de septiembre, imágenes violentas, desesperanzadoras, imágenes de una guerra que no debería haber sido, irrumpiendo turbiamente en la determinación popular; un golpe cobarde, asestado por detrás, a la entraña misma de de la soberanía social. Imágenes de ese 11 de septiembre, imágenes de ese enemigo del mundo, líder entre los terroristas, megalómano insaciable, financiando un feroz golpe de estado. Azuzando a sus perros militares a la caza del presidente democráticamente electo; Salvador Allende.

Sitiando la casa de la moneda, segando la heroica resistencia, de aquel que peleo a hasta ultimo momento, mientras el General Augusto Pinochet se convertía en presidente de facto con la deliberada colaboracion de la CIA, e instauraba de inmediato un régimen represivo y reaccionario. Imágenes de ese nefasto 11 de septiembre de 1973 a lo largo de Republica de Chile.

Una mas de las muchas Maniobras Yanquis sobre los países latinoamericanos, para usurparles su autonomía, militar, económica, política y social. Una mas para exterminar a aquellos que no se ajustan a sus intereses, una maniobra más en nombre de la “democracia”, en nombre de “la justicia Estadounidense”

Una mas de las muchas maniobras yanquis llevadas a cabo aquí, en las Americas, llevadas a cabo allá en el Medio Oriente, y es que parece ser que el hambre de poder, la falta de escrúpulos, los intereses económicos por encima de la vida humana, también están globalizados.

Sin embargo nuestros verdugos, sus siervos, resultaron ser mucho más obedientes que sus Pares trasatlánticos; Que aprendieron rápido las lecciones de Control brutal de lo social, saqueo e irracionalidad, y no dudaron en usar el adiestramiento recibido, para pelear las guerras de sus amos en contra de estos mismos, cuando aquellos, los creyeron precindibles.

Es entonces la historia de eso dos colosos de vidrio y acero, que se erigían, irónicos por encima una tierra desbastada para su propia construcción; como centinelas de una babilonia voraz, que se embriaga así misma, las pupilas giradas hacia adentro, mientras ahoga al resto del mundo en el pantano de su propia avaricia .La historia de una venganza perpetrada por un asesino contra aquel que le enseño a matar. La historia de siempre, la historia de muertos inocentes, en los desiertos Afganos, despedazados por bombardeos criminales, en las calles Neoyorquinas bajo una lluvia de escombros; En los pueblos sudamericanos, en la sabana africana, en las playas del caribe, y en los arrozales de todo Asia, asfixiados por una economía homicida al servicio de su propia codicia.

La pantomima mediática nos seguirá embotando de programas especiales sobre aviones secuestrados, vendiéndonos, la idea de un presente perpetuo, donde nada tiene más causas que la espectacularidad, ni más consecuencia que los puntos de raiting que abultan sus billeteras.

Recordemos entonces, que la historia es mucho mas que un show televisivo. Resistamos con imaginación y coraje, como aquel que peleo hasta ultimo momento, atrincherado en el palacio de la moneda, ese 11 de septiembre de 1973.